martes, 18 de marzo de 2008

Llegó Semana Santa y Las delicias de mi mamá



En esta semana me sentiré súper bien. Podré compartir durante siete días con mis padres y estaré cerca de mi madre para disfrutar todas sus delicias de cocina, jajaja. Aunque hay mucho trabajo para esta semana, como estudiar para un parcial para la próxima semana y un trabajo de comunicaciones II, no desaprovecharé el momento de poder compartir con mis padres durante esta semanita.


¡Claro! Sin duda lo que más disfrutaré, aparte de compartir con mi mamá, es la comida que hace tan deliciosa, esos platos tan exquisitos que provocan chuparse los dedos.


Imágenes tomadas de: http://i6.photobucket.com/albums/y235/joseluismd/642semana_santa_sevilla.jpg y http://i6.photobucket.com/albums/y235/joseluismd/642semana_santa_sevilla.jpg





“Lo que conocemos como mamitis”

El pasado viernes, 29 de febrero, justo una semana después que mi mamá se volviera para Santa Rosa cuando nos hizo la visita, no resistí más. El estrés y el aburrimiento que sentía durante esa semana llegaron a su tope.

A eso de las 10:30 p.m llamé a casa y le dije a mi mamá que me madrugaba al otro día para Santa Rosa. No se ésta reacción tan repentina de donde surgió, solo sé que lo que me dio es lo que cocemos como mamitis. Aunque llevo más de un año lejos de mi hogar no es posible dejar de extrañarlo y menos cuando hay factores que nos afectan tanto personal como laboralmente. Durante esa semana mi relación con mi hermano mayor, con quien vivo en Medellín no fue la mejor; y sin duda eso afecta, y afecta mucho; tal vez por eso sentí ese arrebato de estar cerca de mi madre.




domingo, 16 de marzo de 2008

¡Vino mi mamá a hacernos la visita!



El miércoles 20 de febrero regresaba a mi casa de la Universidad. Como yo siempre soy el primero que llego, encuentro la puerta con seguro.


Este día se me hizo extraño, pues no tenía macho la puerta. Al sentir el TV prendido me dirijo hacia la pieza y encuentro a mi mamá allí. Esa alegría tan inmensa que sentí al ver a mi madre fue increíble. Al instante se me salieron las lágrimas y nos sentamos a hablar un buen rato; tanto que se me había olvidado que tenía que estudiar para unos exámenes. Pues la verdad no importó lo otro, pues tenía a mi mamá cerca y pensaba disfrutarla hasta el viernes que se quedaría. Esa gran alegría era única, tanto que les contaba a mis amigos que mi mamá había llegado de Santa Rosa y que el almuerzo que llevaba para la Universidad ella me lo empacaba, pues me sentía orgulloso de tener a mi madre cerca.




Lo que hablo por teléfono con mi mamá



Siempre que hablamos por teléfono hablamos de todo un poco:
Sobre mis hermanos, la relación que llevamos, sobre como les está yendo en sus trabajos y en sus estudios, etc. Luego me pregunta sobre mi estudio, que si sí me estoy alimentando bien, en fin, todas esas preguntas que hacen las madres cuando se preocupan por sus hijos.


Realmente en algunos casos me incomoda que pregunte tanto, pero me gusta que me escuche acerca de lo que pienso y tengo para decirle.



Imágenes; tomadas de C:\Documents and Settings\Administrador\Configuración local\Archivos temporales de Internet\Content.IE5\KNE2OJFX\tel%C3%A9fono[1].gif y http://www.unjubilado.info/wp-content/imagenes/hablando.jpg

El vacío que se siente al tener a la mamá lejos


Algo que afecta mucho, es el momento en el cual nos ponemos a pensar en nuestra familia.

En los días en que me encuentro deprimido pienso en mis padres. Cuando surgen los problemas, en muchas ocasiones lloramos y los pedimos a gritos, esperamos tenerlos cerca para refugiarnos y evadir cualquier situación por insignificante que sea.

Yo no busco un refugio, me siento mal porque mis hermanos, con los que vivo en Medellín son muy cerrados a su mundo; para mi son muy amargados. Eso a mi me afecta, pues la forma de ser de ellos es muy similar a la de mi padre y la mía es similar a la de mi mamá, es por eso que en algunos casos me sienta solo sin estarlo y la única manera de desahogarme es hablar con mi mamá así sea por teléfono. Y cuando hablo con ella, al terminar me siento nuevo y listo para seguir enfrentándome a mi mundo con un nuevo aire.


Cartas de mamá


Durante las primeras semanas desde que me fui para Medellín pensaba en todo lo relacionado con mi mamá, especialmente en las cartas que nos enviaba a mi hermano y a mí. Pensaba en la primera que me enviaría en este año, en lo que me fuera a decir o contar.


Se que no llegará muy pronto, pues no llevo mucho tiempo sin verla, solo sé, que el día que llegue y la lea, lloraré, lloraré de alegría y de tristeza, pero esas palabras me darán fuerza para continuar y no desistir nunca ante los obstáculos que se me puedan presentar.

Lo que masa fuerzas me da, es la manera en que termina cada carta:


Te quiero mucho hijo mío.
Att: tu mamá

“Otra vez me despedí de mi madre”



Después de estar viviendo por un año en la ciudad de Medellín, regresé a Santa Rosa a casa de mis padres en diciembre de 2007. La alegría de saber que estaría por más de un mes con ellos era inmensa; saber que compartiría de nuevo con ellos durante varios días hacía que se me aguaran los ojos, porque es realmente duro estar lejos de los padres; primero por su apoyo incondicional y además por las comodidades que se tiene al estar cerca de ellos, segundo por el apego y el cariño que se tiene por padre y madre, pero más por la madre.



Ese amor de madre incondicional y que sin duda se siente más que el del padre. Durante este poco tiempo que estuve con ellos dialogamos y reflexionamos sobre muchas cosas y compartimos unas cuantas otras. Más sin embargo nadie olvidaba que llegaría de nuevo mi partida para este nuevo año.



La llegada de mi partida, en la semana del 20 de enero causó entre mi mamá y mi persona una gran tristeza; las lágrimas se apoderaron de nuevo de nuestros ojos como el día en que partí por primera vez para alcanzar mis metas. Tanto ella como yo sabemos que es la ley de la vida, lo complicado es aceptarla.Ya en Medellín, durante esa semana solo pensaba en la segunda despedida que tuve con mi madre después de varios días de estar juntos; y aunque nos veíamos cada quince días el espacio que queda no se ve igual cuando se comparte por 2 días al que queda después de compartir por más de un mes.

Imágen; tomada de http://www.librodearena.com/myfiles/lunadulce/caradeamor.jpg

domingo, 9 de marzo de 2008

Pre- proyecto



¿CÓMO ES MI COMUNICACIÓN CON MI MAMÁ?



JUAN CARLOS AMAYA MIRA
Carné 1044503777


Profesora:
PALOMA PÉREZ SASTRE
Curso: Comunicación II



UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA
Facultad de Medicina
2008




INTRODUCCIÓN

Soy uno de los muchos estudiantes que se encuentran lejos del hogar, que se han ido del lado de los padres para buscar su sueño. No es de dudar que la distancia entre padres e hijos causa en cada uno cierta sensación, de tristeza y amargura por la misma razón de la distancia. Sin duda la compañía que se brindan mutuamente padres e hijos es irremplazable, por eso en estas circunstancias el vacío que se siente es inmenso. Siempre se estará buscando esa compañía de madre o de padre que jamás le había faltado, y poder encontrar de nuevo esa paz y tranquilidad que tienen los hijos al sentirse bajo la protección y/o compañía de los padres.


¿Cuál es mi pregunta?

Para la elaboración de mi trabajo pretendo desarrollar la siguiente pregunta: ¿Cómo es mi comunicación con mi madre?


¿Qué me motivó a escoger esta pregunta?

Inicialmente, me había inclinado por otro tema, pero con el pasar de los días me di cuenta que al estar lejos de los padres se llega, en ocasiones a estados en los que no nos sentimos bien y que afectan nuestra vida diaria.
Para mí, al estar lejos de mi mamá, a quien más me he apegado desde pequeño ha sido un golpe muy duro, y sé que también lo es para ella. La sensación de vacío que siento en muchas ocasiones, de alguna u otra manera ha afectado la relación que llevo con los que me rodean; y durante éstos estados, encuentro en mí sentimientos encontrados o reprimidos, que de alguna u otra manera trato de sacarlos y volver a un estado en el que pueda tomar un nuevo aire.


¿Cómo desarrollar la pregunta?

Sé que es poco lo que me veo con mi mamá durante un semestre, por eso pretendo enfocarme en los momentos en que hablamos por teléfono y las cartas que nos enviamos.
También, trataré de describir algunos momentos en los que me encuentre deprimido, y en los que trate de expulsar los sentimientos que tal vez me agobian y estén afectando mi relación con los que me rodean. Tampoco es pretender contarlo todo, pues considero ésto algo muy personal; lo que pretendo al contar mis sentimientos es como dar una visión de lo que estudiantes como yo sentimos al estar lejos del hogar.